Introducción: La garceta grande es un ave estilizada y longilínea, de gran tamaño, semejante al tamaño de la garza real, aunque su inmaculado plumaje la hace parecer mayor. Hasta hace relativamente poco tiempo, esta gran ardeida solo nos visitaba ocasionalmente durante la invernada, pero, desde hace un tiempo, coincidiendo con su recuperación poblacional en Europa, cada vez son más los ejemplares que recibimos durante el invierno y, lo que es más relevante, algunos reproducen entre nosotros en lugares como las marismas del Guadalquivir. Los ejemplares que podremos ver en el Parque Olivar del Zaudín estarán de paso hacia sus nichos de invernada en Doñana.

Descripción: De un tamaño similar al de la garza real y formas parecidas a la garceta común. Como en esta, el plumaje de la garceta grande se muestra totalmente blanco. El pico es de color amarillo, y su tamaño proporcionalmente más corto que en la garceta común; los pies y patas son de color negro verduzco.

Desplazamiento: En España hay población residente. Durante el invierno se les unen las aves procedentes de Europa. Se trata de una garza fundamentalmente invernante en la Península y Baleares, aunque también está presente durante el paso migratorio. No obstante, se tienen 3 observaciones de la especie a lo largo de todo el año. En general, la población europea es migradora de corta distancia. Un buen número de efectivos invernan en la cuenca del Mediterráneo; otros se reparten por el norte de África e, incluso, llegan a atravesar el Sáhara. Los jóvenes se dispersan en todas direcciones tras su emancipación, en torno a julio, y realizan desplazamientos de hasta 400 kilómetros. Las colonias europeas son abandonadas entre finales de septiembre y principios de noviembre, para ser reocupadas desde finales de febrero hasta comienzos de abril. Los inmaduros no suelen volver a las colonias donde nacieron, sino que se mueven erráticamente hacia el norte o el oeste y recorren, en ocasiones, largas distancias.

Curiosidades: Es una de las garzas más grandes, solo le supera en tamaño la garza imperial. Al igual que otras garzas cuando vuelan lo hacen con el cuello retraído lo que les diferencia de las cigüeñas, grullas y avetoros que lo hacen con el cuello estirado. Para pescar normalmente permanecen inmóviles acechando a su presa con el pico apuntando hacia el agua; cuando la presa se pone a tiro estiran su cuello mediante un movimiento rapidísimo haciendo que el pico se proyecte sobre ella como si fuera un arpón.