Culebra bastarda Nombre común: Culebra bastarda Longitud: 2 m.
Peso: -
Nombre científico: Malpolon monspessulanus
Nombre inglés: Montpellier snake

Introducción: La culebra bastarda o también llamada culebra de Montpellier es una especie de reptil escamoso de la familia Lamprophiidae. Es una serpiente venenosa que no es peligrosa para el hombre. Su longitud puede superar los 2 metros, llegando incluso a los 2,290 m. Sus hábitats son inmensamente variados, se pueden encontrar en bosques de ribera, zonas con matorrales y en las inmediaciones de las poblaciones rurales y urbanas, por lo que el parque Olivar del Zaudín es un entorno ideal para su desarrollo.

Descripción: En machos adultos el diseño es uniforme, con un color de fondo entre marrón y verdoso, y una mancha negra en el dorso, detrás del cuello. Existe dimorfismo sexual en esta especie, además los machos son más grandes y alcanzan una longitud mayor que las hembras. Los machos por la parte superior son de un color que oscila desde el pardo al verde oliváceo con un diseño uniforme. Los más grandes y más viejos suelen tener una zona negra en la parte anterior del dorso que empieza algo más atrás del cuello. En los laterales tienen tonos azulado negruzcos. Por la parte inferior son de color amarillento. La cabeza es pequeña, estrecha, y tiene el hocico algo puntiagudo. Las escamas cefálicas son grandes, la placa frontal, placa situada entre las escamas supraoculares en la parte dorsal de la cabeza, es la mitad de ancha que las supraoculares y aparecen dos loreales a cada lado (escamas de la zona comprendida entre los ojos y las fosas nasales). Carecen de tímpanos. El ojo es de color ámbar oscuro con un anillo circular amarillo en la zona central que rodea a la gran pupila negra. Presenta escamas supraoculares (placas situadas en la parte superior de cada ojo) y las preoculares están dispuestas de modo que forman como una visera, bajo la cual quedaría el ojo protegido. La lengua es bífida y en los labios tienen unas pequeñas manchas blancas orladas de negro. Las mejillas son blanquecinas con alguna mancha marrón. El cuello apenas es perceptible. La longitud de la cola equivale a la cuarta parte de la longitud total del cuerpo. Las hembras tienen en el dorso un dibujo abigarrado, sin ningún patrón a base de manchas negras, blancas, grises y marrones. Los jóvenes se parecen mucho a las hembras, son de color marrón o grisáceo con 5-7 líneas longitudinales de manchas oscuras que también abarcan a los flancos y que son más gruesas en la zona central del dorso.

Curiosidades: Esta especie presenta actividad desde Marzo hasta Noviembre, el resto del tiempo hibernan. Tienen hábitos diurnos. Son muy territoriales y durante la época reproductiva los machos se vuelven muy agresivos entre sí. A veces realizan puestas comunales en las que se juntan los huevos de varias hembras. En algunas zonas se les mata porque existe la creencia de que son perjudiciales para los animales domésticos y para la caza. Al igual que otros reptiles necesitan exponerse al sol para termorregularse y suelen hacerlo encima de las piedras o en las carreteras por lo que muchas mueren atropelladas en las ellas. Las escamas situadas por encima del ojo sobresalen a modo de visera o ceja y sirven para protegerle, además le confieren a la cara un aspecto fiero o de enfado. Sus párpados no pueden cerrarse. Se desplazan reptando y pueden hacerlo a gran velocidad. Cuando se sienten acorraladas yerguen la parte anterior del cuerpo de la misma forma que las cobras a la vez que emiten un ruido similar a un siseo. Aunque son venenosas su peligrosidad es relativa ya que su veneno no es muy potente y no es mortal, además el morder a una persona no es tarea fácil para ellas dado que los colmillos que inoculan el veneno están situados en una zona muy posterior de la mandíbula superior. Practican el canibalismo.


Culebra bastarda Culebra bastarda

Grado de amenaza: No amenazado


ayuntamiento Tomares